La familia es un retrato que cuenta una historia, donde los personajes principales son aquellos que consideraron la unión de sus vidas, haciendo de esta la base fundamental de lo que quisieran aportar a la sociedad, si Dios nos ha escogido para formar una familia, es porque quiere que criemos a nuestro hijos con propósito, tarea nada sencilla, pues no vamos a encontrar un manual para llevarla a cabo, sin embargo podemos seguir algunos consejos si buscamos criar personas de bien.
Para cumplir con esta misión debemos considerar que lo pilares fundamentales de la familia están en adaptar, moldear y configurar, en este folleto puedes profundizar en los siguientes aspectos fundamentales para la crianza:
Compromiso: este valor se afianza con el ejemplo, está relacionado al cumplimiento que las promesas realizadas confiando en que Dios nos dará las fuerzas necesarias para cumplir con los compromisos que hemos adquirido, asumiendo las responsabilidades que generan nuestras decisiones.
Pasar tiempo juntos: Dedicar al menos 10 minutos a nuestros hijos asegura el vínculo familiar, lo importante de este aspecto es que el tiempo sea de calidad, esto nos permite transmitir nuestra historia, ideologías, y otras características que solo nacen de la familia.
Comunicación: Hay que hablar con los hijos siempre, generando confianza y respeto, reconociendo los sentimientos de su hijo, para ello necesita escuchar todo lo que su hijo desee decirle, transmitiendo y manifestando su afecto, decir Te Quiero, es importante.
Reconocimiento: Hacerle saber a su hijo que es importante para usted y para Dios, disculpándolo cuando haya cometido un error, criticándolo menos y valorando sus esfuerzos.
Manejo de Crisis: La salud de la familia no depende de la existencia o no de conflictos, sino de la manera en como son resueltos, y es una conducta que aprendemos en nuestra historia familiar.
Vida espiritual: Debemos ayudar a nuestros hijos a ver, sentir y disfrutar del amor de Dios, dejando ver en práctica nuestra fe, no lo deje solo, oriéntelo, aunque al final su hijo decida continuar o no la práctica religiosa.
Las escrituras enseñan lo que funciono en el pasado, y lo que funcionara en el presente, la palabra de Dios nos da fuerzas para el presente y esperanzas para el futuro.
Si Dios ha considerado que usted es capaz de formar una familia, también da las herramientas para que su familia tenga una crianza adecuada, en este folleto se amplían cada uno de esos temas fundamentales.
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